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Fecha: 29 de junio del 2022 Lectura de 4 minutos Autor: Daniel Álvarez Fernández
Sin duda, emprender se ha convertido en uno de los grandes atractivos en los últimos años en Colombia; éste boom del emprendimiento ha traído consigo cada vez más oportunidades, más conocimiento y también más promesas acerca del emprendedor que logra el éxito en muy poco tiempo; una historia que nos aleja de lo que significa realmente el proceso de emprender.
El acceso gratuito a la información, la dificultad de acceso a oportunidades laborales y las dinámicas propias de generaciones como millennials y los centennials, son algunos de los incentivos para que en Colombia se hayan creado en el último año 307.679 empresas en el 2021 según Confecámaras (Ver reporte de Confecámaras)
Sin embargo, comenzar un emprendimiento es sólo un hito dentro de lo que significa una gran carrera, la cual trae consigo un sinnúmero de esfuerzos económicos, personales, técnicos y de aprendizaje. Es por esto que, entendiendo la historia de muchos emprendedores con los que hemos trabajado en Escala, enmarcamos un reto mucho más amplio y retador en el cual deberíamos enfocar nuestros esfuerzos como emprendedores: mantener un negocio rentable en el tiempo. De acuerdo a Innpulsa (la agencia nacional de emprendimiento e innovación), de las empresas creadas entre 2018 y 2020, al tercer año sólo existían el 64%, mientras que al quinto año sólo permanecían el 54% y al décimo año apenas el 40% respectivamente. Una cifra que deja claro el reto. (Ver reporte)
Después de meses conversando de manera activa con emprendedores, aprendiendo de sus dinámicas y de vivir el proceso de emprender en carne propia, te traemos algunos aprendizajes que a través de Escala Aceleradora hemos recopilado para que tengas en cuenta si estás interesado en emprender. Cabe aclarar que estas recomendaciones no son más que una compilación de aprendizajes basados en conversaciones y ejercicios activos de co-creación, por lo que su fundamentación se da en la experiencia propia y de decenas de emprendedores que han estado activamente vinculados a la comunidad Escala.
1. Enfócate en vender: no sirve de nada si tu negocio luce atractivo, pero eso no se traduce en ventas. Las ventas son la mejor métrica que tiene tu empresa para darse cuenta si realmente genera o no valor para alguien. Esfuérzate en tomar una posición activa para escuchar tu mercado y encontrar lo que él quiere. Mientras más rápido aprendas, mucho mejor. Para que lo puedas ejecutar de manera práctica, saca unas horas a la semana para hablar con tus clientes, trata de entender cómo les parece lo que estás haciendo y cuéntale qué viene. Debes tratar de ser muy astuto con lo que le preguntas y trata de obtener lo que ellos te quieren decir más no lo que tú quieres escuchar, ahí está el éxito.
2. Entiende lo que pasa con tu negocio: deja de teorizar y suponer qué es lo que realmente debería pasar. Enfoca tu energía en entender las dinámicas específicas de tu industria y tu negocio. Acostúmbrate a mirarlo a través de datos y no a través de la intuición. Si quieres un consejo práctico, acostúmbrate a tener mentores o asesores expertos de confianza, que ayuden a retar lo que haces y que te ayuden a ver tu negocio de manera estratégica.
3. No delegues tareas críticas de tu negocio: la delegación llegará eventualmente cuando tu empresa crezca, pero debes ser muy hábil en entender qué tareas te ayudarán a mover tu negocio de una manera más efectiva y ágil. Una vez las identifiques, enfócate en ellas y si puedes, delega las otras actividades.
Una recomendación práctica: realiza una lista de todas las actividades que consideras importante para que tu empresa funcione, identifica aquellas actividades que son las que te ayudan a crecer o que te ayudan a ejecutar su propuesta de valor; esas son las que no puedes delegar.
4. Enfócate en aprender: iniciar una empresa es como aprender a montar bicicleta; irás cogiendo habilidad a través de la práctica, y si a la práctica le sumas conocimiento, seguro tu curva de aprendizaje será mucho más corta. Una recomendación práctica: realiza una lista de las cosas que más te duelen en tu empresa y que son un cuello de botella para operar o para crecer, estos pueden ser problemas técnicos, financieros, comerciales u otros. En esos puntos más importantes, enfócate en aprender.
5. Enfoca tu energía y tu tiempo: es común que las tareas del día a día gasten tu tiempo y energía, por eso siempre prioriza las cosas que son urgentes e importantes, nunca dejes que lo urgente te robe todo tu tiempo, porque es cuando lo importante nunca ocurrirá. Una recomendación práctica: aunque tengas siempre cosas urgentes, saca algún tiempo en la semana para enfocarte sólo en las cosas importantes, las reconocerás porque son aquellas actividades que no necesariamente tienen un deadline muy pronto pero que son aquellas que ayudarán a que tu empresa avance de forma significativa si le empleas algún esfuerzo.
6. Acostúmbrate a hacer experimentos: los experimentos te ayudarán a probar de manera ágil elementos claves de tu empresa, por lo que acostúmbrate a hacer ciclos infinitos de experimentación, en donde determines qué quieres probar (hipótesis), planees un experimento y definas una métrica que te dirá si tus hipótesis eran ciertas o no. Eso sí, nunca dejes de medirlos, recuerda que lo que no se mide, no evoluciona. Una recomendación práctica: define el frente que más requiere tu atención y define un único experimento cada una o dos semanas. Trata de definirlo de una manera acotada y clara. Piensa lo que lograrías en un año si cada semana aprendes algo importante para tu negocio. Y lo más importante, ten en cuenta que son más las veces que falla, a las veces que se acierta en los experimentos, aún así, aprenderás qué no puedes hacer y eso será valioso para tu empresa.
7. Ten paciencia: emprender es una maratón, no un sprint. Cuando entiendes esto, aceptas que emprender es un ciclo interminable de aciertos y desaciertos, por lo que debes ser resiliente y entender que siempre habrá una siguiente oportunidad o que, si los resultados no se están dando a corto plazo, podrás cambiarlos más adelante si te esfuerzas en que así sea. Por eso, ten paciencia y siempre aprende del pasado para construir al futuro.
8. Por último, y esta recomendación es clave: permanece atento a las convocatorias que el ecosistema tiene dispuestas para ti. Existen organizaciones como Ruta N (en Antioquia), Innpulsa, Confecámaras, Bancoldex, Cámaras de comercio y otras entidades (en Colombia); las cuales sacan convocatorias para todo tipo de empresas en cualquier estado de desarrollo. A través de ellos podrás aprender, crecer y retar tu negocio.
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